Cada vez más difícil para las marcas destacarse entre la competencia. Esto pasa en todos los sectores económicos, tanto las pymes como las grandes empresas. Todas luchan constantemente por la atención de los consumidores a través de campañas de marketing, equipos de ventas persuasivos y estructuras de precios competitivos, para poder así tener una ventaja con respecto a las demás empresas.
Necesitamos cuestionar y definir los elementos clave que integran nuestra compañía, para así poder resaltar sobre los competidores y mantener esa condición favorable que nos caracteriza frente a otras empresas.
"Si no tienes una ventaja competitiva ante tu competencia es mejor que no compitas."
Es muy importante definir cuáles son las ventajas de nuestro negocio (competitiva, comparativa y diferencial), pues de esto dependen las herramientas con las que contamos para generar una relación de intercambio duradera con nuestros clientes.
Para cualquier empresa, es súper importante aprender a identificar los atributos que componen su ventaja competitiva. De esto depende la fuerza que la marca tiene que reflejar en un consumidor para alentarlo a comprar.
Además, la presencia de la empresa en cualquier tipo de mercado trae consigo consideraciones generales que no se pueden omitir, elementos como:
- Precios del producto frente al cliente.
- Procesos de producción o de servicios.
- Servicio al cliente.
- simplemente la determinación del FODA de la empresa.
Tenemos siempre que cuestionar y definir los elementos clave que integran nuestra empresa, con ese objetivo verificamos que nuestra diferenciación sea clara y legible en relación al desarrollo de la compañía.
De lo anterior te damos algunos tips que debes seguir para desarrollar una ventaja significativa versus tu competencia, en el contenido, para definir de mejor manera tu estrategia de marketing.
Ventaja competitiva, comparativa y diferencial: ¿en qué se diferencian?
Ventaja competitiva
Este concepto se refiere a todos los elementos y características que hacen destacar a nuestra empresa. Es necesario identificar que la ventaja competitiva es aquella que nos otorga valor en el mercado, pues es el aspecto que asegurará la elección del cliente entre todas las ofertas similares que existen. Se centra en la forma en que vendemos y no en el producto o servicio que vendemos.
A su vez, la ventaja competitiva se divide en:
Ventaja competitiva interna.
Se basa en los costos de producción y el punto de equilibrio que definirá su precio.
Ventaja competitiva externa.
Son las características propias del producto que representan una ventaja directa para el consumidor. Además, otorgan una mejor posición en el mercado para el consumidor.
Lo más importante es identificar los elementos que diferencian a tu empresa de la competencia.
Ventaja comparativa
La ventaja comparativa se establece por medio del ahorro de recursos en nuestra compañía. Esto se refiere directamente al comportamiento de nuestro producto o servicio en su proceso de elaboración. De modo que podemos encontrar que cuanto menos recursos se necesiten para ejecutar una tarea, mayor será nuestra ventaja comparativa.
Si dos empresas compiten en el mercado con el mismo producto y el mismo precio, la ventaja comparativa se encuentra en aquella que tiene un costo menor de fabricación y distribución. Esto quiere decir que una ventaja comparativa es interna, pues está vinculada a procesos técnicos, de producción y, en general, a todos aquellos que definan su punto de equilibrio para marcar su precio en el mercado
Ventaja diferencial
Se refiere a las características que dotan a la compañía de un diferenciador único. Hablamos de qué es lo que distingue o diferencia a la empresa de las demás. Dicho de otro modo, una ventaja diferencial es aquella capaz de distinguir al producto o servicio en todo momento. También podemos pensar que este tipo de ventaja es capaz de diferenciar a un producto de otro, pues establecen la personalidad de marca que lo hace distinto a cualquier otro producto que se encuentre en el mercado.
La identificación de estos tres tipos de ventajas en la empresa ayudará a desarrollar una estructura más sólida de negocios y a marcar la pauta que distinga tus productos o servicios en el nicho de mercado al que pertenecen.
Y con esto se puede establecer una pauta mejor establecida al moemnto de generar una estrategía de Marketing y ventas.
Un ejemplo de lo que hablamos arriba
Aunque los productos o servicios sean muy parecidos, existen diferencias, que, además de dotarlos de personalidad, marcan estrategias distintas para colocarse y mostrarse en un mercado tan competitivo como el de la tecnología. Estas diferencias, ya lo dijimos, son conocidas como ventajas, las cuales independientemente de su tipo, determinan en gran medida la estrategia de negocios con la que se aproximan a sus respectivos buyer persona, al tiempo que marcan una relación específica con el consumidor final. En el siguiente capítulo abordaremos detalladamente las herramientas disponibles para identificar nuestra ventaja competitiva y cómo usarlas dentro de una estrategia de negocios.
Definamos las ventajas competitivas de tu empresa.
En caso de que tu plan de negocios y Marketing actual no contemplen un análisis detallado de tu ventaja competitiva, lo más recomendable es tomar un tiempo y definir este concepto, tanto en función del conocimiento de la empresa como de los planes a futuro que estén en la estrategia de negocios.
Elementos de la ventaja competitiva
De acuerdo con Guillermo Cortés, escritor del blog digital Informa BTL, los elementos de la ventaja competitiva son aquellos que dotan a tu empresa de una superioridad única frente a tu competencia. Entre ellos figuran los siguientes:
- Eficiencia. Es la capacidad de cumplir una función adecuadamente.
- Flexibilidad. Es la adaptabilidad a una circunstancia que no estaba prevista.
- Eficacia. Se define como la capacidad de cumplir una meta establecida.
- Innovación. Permite introducir cambios o nuevos elementos a un plan establecido.
- Velocidad. Es el tiempo en que una tarea o actividad productiva se realiza.
- Capacidad de respuesta. Es la disposición con la que cuenta una empresa para satisfacer cualquier demanda del consumidor.
- Según HubSpot, existen otras cuatro ventajas que hay que tener en cuenta.
Las mencionamos a continuación:
- Precio
- Calidad
- Experiencia
- Servicio
Estas cuatro ventajas competitivas están relacionadas de forma estrecha con un elemento clave en la estrategia de negocios, el buyer persona (cliente ficticio que más se acerca a un cliente ideal). De hecho, la diferencia entre el éxito y el fracaso, en muchos casos, es el conocimiento detallado de tu buyer persona, del cual se desprende el buyer’s journey (viaje del cliente en su proceso de compra y a las distintas fases de este: Descubrimiento, Consideración y Decisión.), relacionado, como dijimos, con estos cuatro elementos.
La ventaja competitiva —también conocida como competitividad de una empresa— depende de factores internos y externos, así como de las características de los productos o servicios que ofrece.
Si se tiene claro cuál es la ventaja competitiva y el papel que juega en el buyer’s journey del consumidor se tendra mayor posibilidad de permanecer activo en el ciclo de vida del cliente. Cada marca posee una personalidad empresarial única y las ventajas que ofrece darán resultados a cada uno de sus clientes. Hay que aprovechar las ventajas que se tiene y administrar los resultados a su favor.
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